Comentába hoy con una amiga que para conseguir llegar a la meta no es lo más importante que los demás crean en que puedes. Has de ser tú quien piense y estés convencido de que eres capaz de alcanzarla.
Hay dos tipos de personas: las que viven sobradas de “valía” y las que carecen en distinto grado de ella. Pero eso… ¿A ojos de quién?
Cuando se tiene un carácter como el mío, apocado y bajo en autoestima, el esfuerzo por alcanzar objetivos es grande; aunque imagino que el éxito borrará todas las penas del camino. Si al final se consigue superar el reto, bienvenida sea la satisfacción y si por el contrario fracasamos, al menos habremos aprendido lecciones que nos serán de utilidad la próxima vez que lo intentemos.
Porque eso sí está claro, siempre hay que volver a intentarlo.
¿No?
Una simple charla mañanera me ha llevado a esta pequeña reflexión "en voz alta"
ResponderEliminar¿Cómo es vuestro carácter?
Abrazos
Tienes toda la razón hay que intentarlo,si se consigue la satisfacción es muy grande y habrá merecido la pena el esfuerzo,sino se habrá aprendido mucho por el camino,eso seguro.
ResponderEliminarMi carácter,es bajo en autoestima como tú,pero soy valiente,o cabezota como prefieras jeje,y tengo paciencia para dar y tomar ; ),así que soy de las que lo intenta una y otra vez,el esfuerzo es enorme pero merece la pena intentarlo hasta que se consiga,y si a la primera no se consigue,pues (aunque me desanime un poco,lo reconozco)sigo y sigo...
Muy buen post amiga mia ^_^
Pasa una buena tarde : )
Besos y sonrisas.
Es cierto Paraiso, que lo que no han enmendado los años, ya no lo enmienda ni Dios, pero a mí me gustaría por momentos ser un poco más autosuficiente, sentirme orgullosa de mí misma y segura y dejar los miedos y debilidades a un lado.
ResponderEliminar¿Qué se sentirá siendo así?
Siempre me lo preguntaré
Un abrazo
Pero ¿qué dices? ¿Que tienes un carácter apocado y bajo en autoestima? ¿Es posible? ¡Pero, chiquilla, con lo que tú vales!
ResponderEliminarde todas formas, te confieso que esa forma de autoevaluarse negativamente es de lo más común. Yo la padezco mucho, desconozco el orgullo y en cambio me fustigo con frecuencia...
¡Consuélate, que vamos muchas personas en el mismo barco!
Un besico
Fracaso bastante ,pero apenas me doy cuenta por continuamente estoy buscando nuevos caminos, caminos que he de dejar porque no son los míos; pero cuando encuentro alguno de mis caminos , detengo el tiempo y , me paro a disfrutar y me admiro de mi propia osadía y vuelvo a creer en mi. Al fin y a la postre vivo y siento en función de lo que creo de mi mismo y no de lo que otros puedan creer de mí.
ResponderEliminarTe leo y me cuesta creer que tienes baja tu autoestima.
Tal vez sean esos momentos en que se presenta el otoño o tarda en llegar la primavera. Quizás una carencia de vitaminas .
¡Sabes me gusta como escribes! Sí, creo que ya lo sabes.
Besos.
Lo rimero es que uno crea en sí mismo.
ResponderEliminarQuerida amiga, no lo olvides: "siempre adelante y cada meta alcanzada es el inicio de un nuevo camino". Se puede y merece la pena intentarlo, te lo digo yo que ya el mero hecho de salir cada día a la calle con un bastón blanco es de por sí un reto.
ResponderEliminarCada cual con sus capacidades y poisibilidades, a partir del carácter, esfuerzo y apoyo, puede conseguir sus retos particulares que, tal vez a a ojos de los demás, puedan parecer pequeños, pero que a nosotros son el estímulo que nos ayuda a superarnos cada día.
Ojalá mi testimonio y afecto te ayuden a tener esa luz que mereces y que yo aspiro a regalarte con mis manos tendidas.
Besos cariñosos.
Fíjate, yo te transmito una persona fuerte, no pensaba que tuvieras una baja autoestima, no te veo así...
ResponderEliminarYo tengo un carácter débil, con baja autoestima, sensible a más no poder, enseguida me hundo, pero también me alzo cuando siento apoyo a mi alrededor, que para mí es muy importante.
Aunque sean agrios los fracasos, siempre se aprende de las cosas negativas, son los que nos ayudan a superarnos y a volver a intentarlo.
Muy interesante tu reflexión, Montse.
Un beso muy grande.
Rosa, sí, sé que hay mucha gente así, pero a esa no la envidio. Envidio a la que es capaz de comerse el mundo y enfrentarse a él si es preciso. Tan negativo es el no llegar como el pasarse, eso sí es verdad.
ResponderEliminarA tí por ejemplo te admiro y admiro tu forma de ser.
Un besote
André, amigo.
ResponderEliminarLa tuya es una actitud envidiable. Simplemente el intentar ya es dar un gran paso. Yo a veces me quedo en la antesala por el miedo al no poder.
¡Y qué alegría dar conseguir algo de lo que te propones! Pero el temor sigue cuando se trata de comenzar otra vez.
Gracia por tus palabras, amigo.
Un abrazo
Tracy,
ResponderEliminarlo primero y debería ser obligatorio, pero a veces no sucede así...
Abrazos
Alberto, precioso comentario cargado de cariño. Es lo más parecido a una conversación en persona. Sí, eres uno de mis contactos blogueros más admirados, por no decir el más admirado y tu ejemplo son toda una actitud de vida a seguir.
ResponderEliminarte agradezco de corazón estas palabras.
Un abrazo
María, por este medio nos formamos nosotros la imagen de los demás y la desfiguramos de lo que es la realidad. Soy como tú. Muy tímida y realmente insegura. Es por eso que "on line" me siento como pez en el agua. Lo doy todo sin mostrar la cara y tampoco veo las caras que ponen los demás.
ResponderEliminarSi algún día nos encontráramos, quizás nos daríamos cuenta de que somos muy parecidas.
Abrazos
Montse, muchas gracias. Que siga dándote luz y siempre que lo necesites, ahí estoy. Bien lo sabes. No importa la distancia o que no sepa cómo es tu voz. Ahí estoy.
ResponderEliminarCuando a mí me dicen discapacitado yo digo persona con capacidad diferente. Cuando a ti te digan débil, di que fuerte con originalidad, jejejej.
Bueno, lo dicho.
Besos de luz en Agua Dulce.
Montse no debemos cejar nunca en conseguir esas pequeñas metas de las que está formada la vida, nos llevaremos palos y decepciones por el camino pero nunca debemos agachar la cabeza, tenemos que levantarnos y luchar, aunque sea con nuestro temores y derrotismo, si no es así la vida no valdría la pena.
ResponderEliminar¿Hace un partidito de tenis?
Besos,
Nooo, jaja, Sauda qué risa. De lo que pensé a lo que leí...
ResponderEliminarEl derrotismo es lógico, pero tiene su márgen. Pasado su tiempo hay que seguir. Es lo que queda.
Un abrazo.
Alberto,
ResponderEliminargracias de nuevo, amigo. A veces se ve más con los ojos del alma que con los de la cara. Tú eres uno de esos casos.
Otro abrazo para tí.
Hola guapísima!!! mira hoy te dejo una frase, una simple frase, pero que dice mucho:
ResponderEliminar"Todos somos unos genios, pero si pides a un pez que escale un árbol, vivirá su vida entera creyendo que es un estúpido." -creo que era algo así- Albert Einstein.
Un besote!!!
Creo que entro en tu blog por primera vez, sé que eres de Almería, te veo por los blogs amigos pero no sabía que eramos paisanas.
ResponderEliminar¡¡Adelante amiga me engancho a tus filas y cuando quieras nos conocemos en persona!!
Un abrazo desde mi Librillo.
Bueno... yo esto de los objetivos y los proyectos y demás hace tiempo que lo he relativizado.
ResponderEliminarVivo menos esclavo así.
Besos.
No tienes nada nuevo Montse, pero te dejo mis saludos y te traigo otros saludos, los de Sindel, aquí te dejo su mensaje:
ResponderEliminar"Qué lindo ese saludo de parte de Montse, es una persona bella y una gran escritora, mandale de mi parte un abrazo gigante".
Dar el primer paso me es costoso, pero ya lanzada o empujada, sigo adelante con todos mis temores. Siempre veo errores y pienso que podría haberlo hecho mejor ¿será la falta de autoestima? Nunca me doy palmaditas en la espalda, jeje tampoco llego, pero ya me entiendes.
ResponderEliminarBesos y siempre adelante.
Marifé, me encantó tu frase. Soy muy de "frases" y esta no tiene desperdicio. Gracias por el regalo.
ResponderEliminarUn besote
Rosario, encantada. Sí, yo te he visto por ahí también y sabía que eras de Almería. Creo que alguna vez te dije algo, pero no estoy segura.
ResponderEliminarEstamos en contacto.
Cuando quieras nos tomamos un café.
Toro, pues si a tí esta medicina te hace sentir mejos, adelante! No dejes de tomarla.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias María,
ResponderEliminareste mundillo es tan pequeño como inmenso. No, ahora me tomo el blog como un hobby y no como una obligación.
Gracias
Un besote a las dos
Claro que te entiendo, Mar. Tu actitud es la normal. Yo a veces pienso que si se pudiera comprar la confianza en sí mismo, como se compra el pan en la panadería, muchos cambiaríamos.
ResponderEliminar¿No?
Un abrazo
Por supuesto que hay que volverlo a intentar. Te tengo como persona fuerte sin conocerte. Y cuando te conozca algún día , lo comprobaré, seguro.
ResponderEliminarBesos
Pilar,
ResponderEliminarUff, no creas. Me amedrento por muchas cosas y eso me impide dar el salto.
Un abrazo
Hola amiga mia, te desnudas ante nosotros y es de gran valentía el hacerlo, no creas.
ResponderEliminarMi carácter creo que está en el punto medio: ni demasiado osada, ni demasiado apocada. Pero es verdad que a veces hago copio de mucho arrojo y no me achanto tan fácilmente, con lo que el camino por recorrer se me hace más ligero.
Mi autoestima está con buena salud, porque tampoco es bueno ir echándose mierda encima continuamente, o eso creo. E igualmente, tampoco es bueno halagarse todo el rato, porque caeríamos en un pozo del que es difícil salir. Con buena salud, me refiero a que creo que está en un...punto medio.
Creo que cada uno debe explotar al máximo sus virtudes y corregir sus defectos. Por cierto que me gusta la cita que te han escrito de los "peces" ...sí, eso es muy cierto.
Un besote desde mi alambrada, que hoy se ha teñido de espinas.
ResponderEliminarMi querida Montsita, tu eres genial en todos los sentidos, créetelo!!!!
Muaaaaaaaa.
Angie
¿Sabes Montse?, lo importante es seguir aprendiendo y seguir intentando las cosas, porque así es como evolucionan las personas. Sigue para delante amiga. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarLaura, qué comentario tan... como conversación de amigas. Me encantó. Es bueno que a veces nos dejemos "transparentar". Así nos conocemos mejor y si algún día logramos encontrarnos, la sorpresa es menos fuerte.
ResponderEliminarUn abrazo y mil gracias.
No entiendo lo de las espinas. Ahora pasaré por tu blog a ver si hay algo que no sé.
Angie,
ResponderEliminartú me miras con demasiado buenos ojos.
Son tonterías que a veces, menos mal que sólo a veces, se pasan por mi mente.
besos
Pepe,
ResponderEliminargracias por tu apoyo y tus buenos consejos. Sé que ambos son sinceros y por eso los agradezco aún más.
Un abrazo
Yo conozco gente que parece que se come el mundo y luego por dentro tiene una cantidad de miedos bestiales. Sin embargo otra gente, en su discrección guardan un saco de cosas valiosas que su humildad no les deja sacar a la luz.
ResponderEliminarYo siempre huyo de la gente que presume de que se conoce a si misma y que dice que tiene un carácter fuerte como si eso fuera una virtud.
No creo que en esencia nos conozcamos.
Prefiero mil veces a una persona apocada con los pies en la tierra que a una muy echada "pa´lante" que siempre presume de su osadía.
Seguramente seas menos apocada de lo que eres. Es curioso... A veces el concepto que tenemos de nosotros mismo no es el que tienen los demás....
Besitos
Pilar, hacernos una idea de como son las personas a través de la pantalla es difícil, porque precisamente nos escudamos en que no nos ven para sacar lo que cara a cara no haríamos.
ResponderEliminarA veces una persona se nos muestra tal cual es desde el principio, y otras con el trato vamos descubriendo facetas que desconocíamos de ellas.
En resumen, que es muy difícil conocerse y conocer a los demás cuando no hay una convivencia muy cercana.
Ten por seguro que soy la timidez personificada.
jaja
Besos
Sí así te sientes y te ves a tí misma...nos tienes engañados a todos. Parece que te pones el mundo por montera. Pues eso, que te creas tu valía, pues como tú has dicho no basta con que lo crean los demás, pero anima mucho que te la reconozcan.
ResponderEliminarUn beso.
Un día descubrí, Pilar, que tras una máscara la vida es más fácil para aquellos que como yo sufren de falta de autoestima. Desde aquel momento la gente ve la máscara y con eso se quedan. Sólo unos cuantos conocen lo que en realidad hay debajo.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo ,también me consideraba una persona con baja autoestima,hasta que un día me di cuenta que todo no lo tenía que hacer bien,es cuestión de no dispersarse analizar y canalizar toda nuestra energía en aquello que si tenemos aptitudes y aplicar toda nuestra energía en hacerlo
ResponderEliminarYo no conozco a nadie que destaque en todas las facetas de la vida.Por otra parte seria muy aburrida,por no decir otra cosa,muchas veces enamoran mas los defectos,a mi me produce ternura,ver la debilidad en los otros y en nosotros ,no es malo,es humano.
Hummm... De esto podríamos hablar largo y tendido. Mi opinión de ultramaratoniano, quizá mejor decir ex-ultramaratoniano, es que para llegar lejos tienes que olvidarte de que quieres hacerlo y anda, simplemente anda. Preocúpate sólo del siguiente paso, del siguiente recodo, de la siguiente cuesta. Te perderás, tendrás que volver atrás, pero si no te paras siempre conseguirás avanzar. En cambio, si te fijas objetivos, uhhh... malo. En cuanto el primero falle vendrán las dudas, los miedos...
ResponderEliminarAnda, Montse, sólo anda.
Un abrazo (y un empujón) ;)
Jaja, Carlos, eso hago cada día y como tú dices voy recorriendo etapas que al final conducen al objetivo marcado. Creo que las dos opiniones son compatibles, yo diría que inseparables la una de la otra. Sé que tu comentario es metafórico, pero mi respuesta sirve igual.
ResponderEliminarBesos
Si y disfrutar al máximo del camino que vamos recorriendo , que es lo que realmente nos va a hacer felices,esa lucha y el esfuerzo en conseguir los obgetivos, porque una vez conseguido muchas veces dejamos de valorarlo,o rápidamente nos marcamos otro.
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