Hacía frío en el exterior, y una fina capa de escarcha se había formado sobre los cristales.
Dibujó un corazón con su dedo índice sobre el vaho que cubría, cual tul de seda, el cristal de la ventana. Lo había imaginado perenne, imperecedero, pero a los pocos segundos comenzaron a resbalar por la fría superficie, tristes gotas que dejaban a su paso un fino hilillo mojado, que hería de muerte al bonito corazón.
Después siguió un nuevo intento, con el mismo resultado, y otro más, que incluso se deshizo aún más rápido.
Me pregunto cuánto puede durar un corazón, dibujado sobre la escarcha del cristal…
De nuevo una imagen inspira mis palabras...
ResponderEliminarAbrazos
Cuando joven me gustaba pintar corazones en cualquier lado... Abrazos
ResponderEliminarMontse algunos corazones, como esos que en la juventud se graban en la corteza de los árboles son más duraderos, los del cristal son actos reflejos de esa persona en la que pensamos.
ResponderEliminarMe ha gustado tu entrada, sencilla y con deseos de que perdure en el cristal.
Besos,
Solo mientras dure la escarcha, besos.
ResponderEliminarMUY DELICADO TRABAJO.
ResponderEliminarUN ABRAZO
¡Cuántos corazones habré dibujado en mi adolescencia con el vaho del espejo! y también en una hoja en blanca ¡ni te imaginas!
ResponderEliminarUn besazo.
siempre podemos dibujar uno nuevo
ResponderEliminarbesos <3
Yo he sido muya afortunada porque la suerte hizo que se me cruzara hace mucho tiempo mi marido y estoy segura que él será mi corazón de por vida.
ResponderEliminarPor lo tanto nunca he tenido el corazón herido. Dejo que me hieran personas de mi entorno que supongo que no tienen derecho a hacerlo y que yo las dejo. A ver si aprendo a ser fuerte.
Un besote
Yo he sido muya afortunada porque la suerte hizo que se me cruzara hace mucho tiempo mi marido y estoy segura que él será mi corazón de por vida.
ResponderEliminarPor lo tanto nunca he tenido el corazón herido. Dejo que me hieran personas de mi entorno que supongo que no tienen derecho a hacerlo y que yo las dejo. A ver si aprendo a ser fuerte.
Un besote
Tal como la vida misma...
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Besos.
Te has expresado muy tiernamente!,
ResponderEliminary tu interrogante muy reflexiva, Realmente que siempre anhelamos ver ese corazòn acariciàndonos aunque se derrita la escarcha....
Deseamos que perdure nuestro sentir infinito, es la calefacciòn del alma!.
Un fuerte abrazo Montserrar
con toco cariño!
Ligia, no habré pintado yo corazones en la arena...
ResponderEliminarBesos
Sauda, lo tenía escrito por ahí. Se ve que algún día dibuje un corazón sobre el cristal empañado y plasmé la experiencia, pero no había visto la luz.
ResponderEliminarUn secreto. A mí también me gusta. Acaba uno con ganas de llevarlo a cabo, ¿Verdad?
Besos
Amapola
ResponderEliminareso sí es cierto, pero la experiencia es la misma...
Un abrazo
Gracias, Relthi.
ResponderEliminarLLevaba tiempo durmiendo en los rincones del PC
Un saludo
María,
ResponderEliminary cuando el vaho vuelve, si no has limpiado el espejo, el corazón vuelve. ¿Te fijaste?
Besos
Puri,
ResponderEliminaruna y mil veces...
Un abrazo
Pilar, creo que cuando lo dibujamos, todos pensamos que ese corazón durará siempre, pero a veces nuestros cálculos fallan y el corazón se empieza a deshacer.
ResponderEliminarUn abrazo
Toro,
ResponderEliminarGracias, no eres sencillo de satisfacer.
No te lo tomes a mal, sino como un piropo.
Abrazo
Francisco.
ResponderEliminarQuizás porque lo que reflejo es tan sencillo como lo escrito. Todos lo entendemos. ¿Quién no ha dibujado alguna vez un corazón sobre el húmedo cristal?
...
Un abrazo
Cuando las imágenes inspiran historias me parece un proceso de lo más creativo.
ResponderEliminar¿Cuántos corazones hemos dibujado en los cristales del coche empañado? ¿y cuando se van y de repente al secarse ...vuelven...? ¡ay! yo creo que duran hasta que sencillamente les pasamos el limpiacristales y volvemos a empezar. ¡Como la vida misma!
Un beso muy agradecido por estar siempre atenta a mis palabras. Feliz sábado y domingo!!
Laura, en el espejo del baño después de la ducha, en la ventana del coche en invierno, en el retrovisor de fuera cuando hace frío... Es una imagen tan romántica como bonita ¿Verdad?
ResponderEliminarTe he enviado al Face una cosilla por si estás interesada.
Abrazos
BUENAS NOCHES AMIGA MIA,
ResponderEliminarCASI TODO EL MUNDO HEMOS PINTADO CORAZONES EN CUALQUIER PARTE,,,
YO LO SIGO HACIENDO MUCHO. EN LA ARENA ¡ MUCHISIMO ! PERO TAMBIEN DURAN NADA POR QUE LLEGA UNA OLA Y
¡ ZAS ! SE LO LLEVA DE MOMENTO,
LO IMPORTANTE ES QUE EL NUESTRO
SEA POR SIEMPRE DURADERO Y HUMANO...
UN ABRAZO, CONHITA
valoro mucho lo que haces un gran beso
ResponderEliminarCorazones heridos, ufff ! Quien no lo ha dibujado?
ResponderEliminarBesos :))
Evolucionamos como la escarcha del cristal...algun@, incluso derretido en gotasresbaladizas, sigue al cortejo fúnebre de lo que una vez fué un corazón.
ResponderEliminarUn besOte grande, amiga!!!!
Corazones como el eco de sus latidos que desaparecen para renacer con otros boom, boom!!!
ResponderEliminarEntrañable y poético.
Besos.
Conchita, qué bonito comentario. Me encanta dibujarlos sobre todo en papel, en donde sé que durarán más...
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Carlos,
ResponderEliminarotro para tí.
;)
Gaby, yo hubo una temporada que los dibujaba con su flecha clavada y mira tú que el significado no era de herido, sino de enamorado.
ResponderEliminarBesos
Oteaba, sigo pensando que me quedo con los corazones como símbolo del amor y no del desamor.
ResponderEliminarPositivismo al poder!!
besos
Mar,
ResponderEliminargracias. La verdad es que es una imagen que todos hemos observado alguna vez.
Un abrazo
En estos casos, más vale dibujarlo en cemento, ahí sí que se queda jj
ResponderEliminarCorazón sobre el cristal
ResponderEliminartermina desdibujado.
Un beso
Amiga:
ResponderEliminarQuizás se pueda borrar este corazón y pintar uno nuevo. En otro sitio.
Un abrazo.
Bonitas letras y linda imagen.
ResponderEliminarSaludos desde Creatividad e imaginación fotos de José Ramón
Alfonso,
ResponderEliminarno serías el primero que lo hace.
Jaja!
Un abrazo
Cierto, Marisa.
ResponderEliminarLo bueno es que se va para volver...
Besos
Celia,
ResponderEliminarPero esta vez con tinta sobre un papel.
Un abrazo
Gracias, José Ramón.
ResponderEliminarBienvenido a mi rincón.
Te devolveré la visita.
Un abrazo
Yo también me lo pregunto, pero suelen ser tan persistentes...
ResponderEliminarUn abrazo, Montse
Si les dejamos, Alborada.
ResponderEliminarUn poco de vaho, un corazón dibujado y cada vez que queramos ahí estará.
Un abrazo
Yo los he dibujado muchas veces, incluso en el cristal del baño cuando me duchaba, ahora, me empezaron a gustar más cuando podía atravesarlos con una flecha y dos nombres en sus extremos
ResponderEliminar¡Jaja, Qué tontos éramos!
Teresa
Teresa, tontos no, enamorados, y cualquier cosilla nos llevaba a pensar en el otro y si no, quien esté libre de pecado... Jaja
ResponderEliminarBesos
¿Y porqué dibujar un corazón en escarcha? Porqué a veces nos empeñamos en mantener una ilusión que no es más que humo. A veces es mejor poner los pies en la tierra e intentar dibujar nuestro corazón allí donde sepamos que podemos dejar huella.
ResponderEliminarUn beso. ;)
El observar como se derrite y va dejando hilillos de agua mientras pierde la forma, tiene su encanto. Además siempre podremos dibujar otro y repetir el proceso... Nunca dibujé uno ni en cemento, por su falta de romanticismo, ni en un árbol, porque es herir a algo que me fascina. Puede que haya dejado alguna huella en un banco, pero no lo recuerdo...
ResponderEliminarBesos