Cuando el más allá se ha convertido en entorno.
Cuando las sorpresas han dado paso a la rutina,
es hora de llamar a escena a la bendita imaginación.
Pero lo malo es que a veces ésta no quiere actuar...
¿Y entonces qué nos queda?
Una frase que ha salido de muy dentro...
¡Buena pregunta!, inventar y buscar nuevos caminos que nos permitan soñar."La vida es para vivirla , no par soportarla".
ResponderEliminarBesos
Pero a veces, amigo André, como digo en mis letras, esos sueños se niegan a jugar su papel...
ResponderEliminarDeseo que los tuyos se vean cumplidos.
Un abrazo
Cuantas veces me siento así. A veces la motivación y como dice André, los sueños, dejan de estar, y entonces la tristeza acampa en nosotros. ¡Como te entiendo, Montse!
ResponderEliminarAbrazos de Teresa.
Teresa,
ResponderEliminarCreo que todos nos sentimos así alguna vez, pero no nos percatamos y por eso no nos afecta tanto.
Yo creo que en esos momentos, una mano amiga es fundamental.
Un abrazo
Hay que insistir en llamar a la imaginación, al final acude.
ResponderEliminarTracy,
ResponderEliminarTu positivismo anima. Se ve que es contagioso.
Gracias.
Un besote
La imaginación es un arma poderosa para cambiar la realidad que vemos, porque, la imginación, es el primer paso para convertir en realidad nuestras fantasias y deseos. Como la imaginación es cosa nuestra y real, esos pensamientos se convierten en nuestros y reales en cierta medida. un abrazo
ResponderEliminarLa respuesta SIEMPRE va a ser vivir, andar nuevos caminos, no puede haber rutina siendo la vida ta inmensa y bella; sólo hay la rutina que nosotros mismos nos hemos impuesto por miedo a la aventura o por desidia.
ResponderEliminarUn gran abrazo Montse
Montse...no soy muy de dar consejos, pero lo que suelo hacer en situaciones similares es sentarme sobre la arena de la playa y mirar el mar...dejar que los pensamientos se mezan junto al ir y venir de las olas...y soñar con todas las posiblidades que hay más allá de la raya del horizonte...algunas las acabarás realizando...otras son para seguir soñando...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo!!!!
Hmmm, no sé si lo he captado, déjame que lo vuelva a leer y lo piense. :-)
ResponderEliminarEl sillón,
ResponderEliminarlo malo es como digo cuando la imaginación se niega a cooperar.
Es tan importante que no dejemos de entrenar para que siemmpre esté lista y en forma...
bienvenid@.
Abrazos
Drac, es cierto, la teoría debería ser esa y la práctica también, pero a veces por una u otra razón, no coinciden y ¿entonces?
ResponderEliminarHe ahí el dilema.
Un besote a tí también.
anakonda,
ResponderEliminarsoy de esas, en un rato salgo a caminar a la orilla del mar y cuando voy sola a pensar, pero a veces mis pensamientos se tornan algo agrios, y entonces mi reflexión, no tiene el resultado esperado.
A veces la rutina nos impide evolucionar.
Besos
Amelche,
ResponderEliminaraquí te espero.
;)
Besos
Montse no siempre la imaginación quiere volar, a veces está aletargada, prueba a sentarte en un banco de cualquier parque y deja que las sensaciones acudan a ti, posiblemente entre el canto de los pájaros, la risa de los niños y el andar cansino de los mayores encuentres un punto para soñar y volar.
ResponderEliminarDentro de media hora me marcho a mi parque a caminar y pensar.
Besos,
Sauda,
ResponderEliminarmientras no te subas a tu nube...
Sí es cierto, a veces no es culpa de la imaginación sino que nosotros estamos cerrados a ella.
Un bonito comentario. Gracias.
Pues, si me permites mi humilde opinión es que se activa en cualquier cosa de cualquier esquina de la vida...a veces se esconde pero, sin dudarlo, ¡siempre sale a nuestro encuentro sin forzar nada!.
ResponderEliminarMontse, un beso grande
Bueno, a veces nos falla, pero, en ese caso, también valen la realidad y los sentimientos. La recuperarás pronto, no te preocupes, pero no has de esperarla ni llamarla. ya vendrá ella...
ResponderEliminarUn beso, Amig@.
Por supuesto amiga Oteaba se te permite contribuir, y más si tu opinión es tan positiva.
ResponderEliminarUn bonito comentario cargado de buenas vibraciones.
Besos
Salamandrágora,
ResponderEliminarsí, quizás sea solo cuestión de tener paciencia y esperar a que aparezca.
gracias, amiga.
besos
Queda el hastío.
ResponderEliminarSiempre.
Besos.
A eso nos aferramos más de uno, Toro.
ResponderEliminarAbrazos
Cuando no tenemos nuestra imaginación, nos queda la imaginación de los demás. ¿De qué manera crees si no que nacieron los cuentos? No sólo para darnos la imaginación que no tenemos, si no para sembrar en nosotros las semillas de nuevas imaginaciones.
ResponderEliminarEn los tiempos grises, sólo las lecturas dan color.
Ea.
Estoy que me salgo :P
ResponderEliminareso es el otoño Montsita.......!!!
pero a ti y a mi nos gusta.....así que pinta ocres y sigue soñando e imaginando que todo eso lo haces muy muy bien!!!
Por cierto....este año juntas a Granada a ver a los niños no???
Bso
Pues sí, Alfonso, es un comentario sin desperdicio. La verdad es que creo que sin imaginación el mundo se pararía. Y es cierto, siempre queda la de los demás cuando la nuestra se hace la remolona.
ResponderEliminarUn abrazo
Angie,
ResponderEliminarSí, cuando quieras, jaja. La verdad es que mi hijo piensa venir MUY a menudo. Así que ...
¡Ay, amiga si ese otoño que a mí tanto me gusta se dejara sentir aquí!
Lo vivo de recuerdos.
Un besote
Es que, ¡te pones muy profunda! :D Y no sé si capto todos los matices.
ResponderEliminarHabrá que volver a dar sorpresas para vencer a la rutina y obligar a la imaginación a que no sea tan vaga y espabile. En cuanto al más allá... mejor nos quedamos en el más acá y por muchos años. Tiempo tendremos de ir al más allá.
Jaja, Ana, me hiciste reír. La rutina es una losa muy pesada y ¡pobre del que tenga que acarrearla por mucho tiempo!
ResponderEliminar;)
Besos
Todo pasa Montse, pasará. yo tambien sé de lo que estás hablando. Estoy aquí.Besos.
ResponderEliminarInventarla, Montse, inventarla, donde existen matices grises, llenarlos de azules, y donde se instala el negro pintarlo de verde esperanza, aunque no sepamos de dónde sacaremos los colores...
ResponderEliminarMi abrazo
Momentos,
ResponderEliminarmil gracias. Sí a veces no es sólo el cielo el que se llena de nubes...
Un abrazo
Alborada
ResponderEliminarSí, reconozco que lo último es tirar la toalla, pero es que a veces, nos resulta tan difícil llenar de colores la vida, cuando nuestros ojos solo ven blanco y negro...
Gracias
Un abrazo
Alimentarla con todo cuanto nos rodea...
ResponderEliminarabrazos :)
A veces cual niña mimada, se niega a comer, amiga.
ResponderEliminarAbrazos
Pues entonces no la obligues... si está bien alimentada, un par de días ayunando no le hará mal ;) depués se comerá hasta las piedras.
ResponderEliminar¡Pobre imaginación! mejor que no me lea ;)
buena semana
Jaja Mariluz, eres un solete.
ResponderEliminarOtro abrazo