Desde el mismo despuntar de sus primeros brotes, se supo diferente, pero optó por vivir allí...
Rodeada de piedrecillas, a orillas de un río y, flanqueada por otras plantas de un color más natural, el verde, creció feliz.
Rodeada de piedrecillas, a orillas de un río y, flanqueada por otras plantas de un color más natural, el verde, creció feliz.
Paseábamos a orillas del río Andarax y esta mata, de la que carezco de más datos, llamó mi atención.
Todo a su alrededor era gris o verde, por lo que ese amarillo intenso, más típico de una flor, que de simples hojas, se hacía notar, pero guardando un equilibrio total con el entorno.
Os aseguro que en nuestro paseo no encontramos ninguna otra planta como esta.
¿Estaba fuera de sitio?
Quizás, pero su orgulloso arraigo a la roca, y la belleza que irradiaba, nos asegura que crecía feliz allí.
¿Molesta?
- No
¿Es molestada?
-No
Después de la entrada de ayer, en la que hablaba de esa gente que “es distinta”, sabe que lo es, y no consiente una convivencia acorde al mundo que la rodea, recordé esta fotografía.
Aprendamos las lecciones, que de forma gratúita, nos regala la madre naturaleza.
Justo hace unos segundos acabo de publicar respuesta en tu anterior entrada Montse, evidentemente sin leer esta. Nos hemos cruzado y suerte de la postdata que escribí, si no, parecería que sabía lo que ibas a escribir hoy, jejeje...
ResponderEliminarUn beso. ;-)
PD. El texto en naranja apenas se lee...
PD2. La foto es preciosa...
PD3. Soy el tío de las postdatas... :-P :-D
Jaja, Carlos, nada más ver lo del color del texto lo cambíe. Entraste casi sin publicar del todo.
ResponderEliminarYo también te he contestado.
Me encantaría tener una charla contigo sobre este tema, quizás acabaramos tirándonos de los pelos, pero pese a eso me encantaría.
Pero eso sí "face to face", que los ojos también hablan.
Besos de nuevo
Yo soy un caballero, o al menos lo intento, y jamás discutiría con una dama hasta el punto de perder los papeles. Además estoy seguro de que no estamos tan en desacuerdo. Por mi parte, fin del tema, que darle demasiadas vueltas al mismo asunto no hace más que hacernos perder la perspectiva, (y que no dejemos de cruzarnos respuestas, jejeje...)
ResponderEliminarCarlos,
ResponderEliminarAhora un abrazo, que sabes que me gustan más.
La imagen es preciosa.. tu metáfora excelente..
ResponderEliminarUn beso.
Un abrazo
Saludos fraternos...
Preciosa la imagen. A veces, un capricho de la naturaleza se convierte en belleza.
ResponderEliminarBesos...!
Buena reflexión amiga, estar atentos a lo que la naturaleza transmite es una oportunidad, nosotros decidimos el estar atentos.
ResponderEliminarGracias por compartir.
Cálido abrazo.
Adolfo,
ResponderEliminarGracias amigo, el lugar era realmente mágico.
Abrazos
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Cornelivs,
Cierto, tan caprichoso como bello.
Un besote
Paco,
ResponderEliminarestar atentos y estar abiertos a captar lo que la naturaleza nos dice ...
Gracias por tus palabras
Un abrazo
¡Qué bonita! Me encantan las plantas. No necesitan más camuflage que su silencio.
ResponderEliminarLa imagen es bella, cierto, pero esa planta parece crecer en un pedregal, en un medio hostil. Los colores vivos en la naturaleza sirven para llamar la atención al sexo contrario como en el caso de los pavos reales o en el de las ranitas tropicales de colores vivos, que, sin excepción alguna, son venenosas. Probablemente esta planta deba adaptarse a un medio nada favorable o se extinga. La naturaleza es un laboratorio de pruebas en real donde cada especie lucha por la supervivencia y éso es lo más maravilloso que hay. Un beso.
ResponderEliminarHola niña...
ResponderEliminarUna preciosidad de planta, de seguro ha querido nacer y vivir en ese lugar para dar ese bello colorido a unas piedras cansadas de lo sobrio y con ganas de alegria..
Un besote de buenas noches
“No olvides el código de la vida: “existir”, ni su consigna: “ningún resquicio a la muerte” y que la madre naturaleza no entiende de propiedades ni de licitudes artísticas, así no te sorprenderá su fuerza, cuando te alcance, solo, disfruta.” TJW Tronken
ResponderEliminarCriatura,
ResponderEliminarEsa planta todo menos camuflada. LLamaba la atención a larga distancia por su colorido tan fuera de lugar.
un abrazo
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Pedro,
No sé, no creo que sea venenosa. Pero no te niego que me gustaría saber algo más de ella. Si su especie es así o, simplemente si ella ha creado su propia forma y color.
Un abrazo
Balovega,
ResponderEliminarquizás sea esa la misión de nuestra amiga.
Pues la está cumpliendo a la perfección
Un abrazo
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Rlfox,
Tronken siempre tiene palabras acertadas.
Sí, la naturaleza en su sabiduría nos hace estos regalos de vez en cuando para que cada cual interprete.
Un abrazo
La madre naturaleza nos regalas belleza, es importante darnos cuenta de ello, lo que muchas veces, no es así.
ResponderEliminarUn besazo.
Ser diferente está bien. Le da a uno genuinidad. Pero a veces, no es nada fácil. Te lo digo yo que lo he vivido en mis carnes :)
ResponderEliminarMaría,
ResponderEliminarse trata simplemente de caminar por la vida con los ojos abiertos.
Un abrazo
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Alfonso,
Es sólo cuestión de que los que son diferentes se amolden al entorno, como la planta amarilla a su pedregal, y no viceversa.
Un abrazo
Diría que es un boj. Su madera se utilizaba también para hacer cucharas (por su dureza), asi que... no es vevenosa!
ResponderEliminarBixen,
ResponderEliminarLo investigaré.
Mil gracias.
Un abrazo
Sin duda, las mejores lecciones nos son entregadas con esa evidencia y esa simpleza que tiene la naturaleza.
ResponderEliminarLos seres humanos tendemos a complicarlo todo un poco más.
Bonita fotografía.
De belleza arraigada.
"El cardo más bonito... nace en lugares inaccesibles"
Recordé ese viejo dicho oriental.
Saludos.
Es magnífica la Madre Tierra.
ResponderEliminarDe repente, te pone en el camino esa pequeña conquista para el ojo y te demuestra que en la diferencia, hay belleza.
Me ha encantado tu encuentro
Saludos!!!
sir Bryan
ResponderEliminarBonito comentario, y puntual aclaración la de los cardos, pero creo que son los cactus los que cuanto más adversas son las ccndiciones en las que viven más bella es su floración.
Un placer tenerte por aquí.
Abrazos
Xiana,
ResponderEliminarCierto, en lo más sencillo encontramos a veces unas dosis ce belleza insospechada.
Te aseguro que su color se veía desde muy lejos, como si nos llamara para atraernos hacia ella.
Un abrazo
Una preciosa metáfora...Besotes
ResponderEliminarCarla,
ResponderEliminarGracias.
;)
Besos
La naturaleza nos da
ResponderEliminarcada día lecciones de
subsistencia aunque
el medio no sea el
más acorde,el ser humano
tendría que aprender
más de ello.
Con respecto al post
anterior todo lo que hemos hecho no sirvió de nada,
porque según las explicaciones tenían su motivo.
De todas formas te diré que a nosotros nos dejaban entrar
pero no lo hicimos.
Eran otros tiempos, hoy no ocurriría.
Mil besos
La belleza de tu metáfora es comparable a la belleza que la naturaleza nos regala...
ResponderEliminarNo dejes de ser tan natural Montse!!!
un abrazo!!
Marisa,
ResponderEliminarestoy como sabes totalmente de acuerdo. Hay tantas cosas que se nos escapan y son verdaderas señales que nos indican el mejor camino...
Y de lo de Dublín, sigo diciendo, y conociendome sé que lo haría, que yo hubiera investigado.
Yo he vivido en Inglaterra y nunca tuve problemas de ese tipo. Al contrario, a los españoles se nos apreciaba ;)
Un abrazo grandee
El Ente,
ResponderEliminarPara lo bueno y para lo malo, que lo hay, soy así y no sé fingir ( lo que me hace pasar más de un apuro).
Y hablando de Naturaleza, es tanto lo que nos da, y tan poco lo que aprovechamos...
Gracias ;)
Un abrazo
Yo con camuflada me referia a no destacar en el sentido de la adaptación al lugar, al fin y al cabo está ahí como si estuviera cualquier otra. :)
ResponderEliminarCriatura,
ResponderEliminarCierto, está totalmente integrada en el entorno.
Un abrazo
Qué de cierto tienes todo lo que expresas. Es verdad que muchas veces podemos recibir señales o indicios que escapan a nosotros y que muchas veces las tenemos delante y sin más pasan como si de aire fuera. Si es que ....ainss. Un beso fuerte.
ResponderEliminarGracias Miguel Angel.
ResponderEliminarUn abrazo
Una planta asombrosa. De dónde la sacaste!!! Preciosa.
ResponderEliminarUn beso.
Esas diferencias hacen la individualidad de cada uno de nosotros.
ResponderEliminarMuy buena esa imagen.
Un placer leerte.
Josef,
ResponderEliminarEstaba allí, se veía en la distancia y me acerqué...
Un regalo de la naturaleza.
Un abrazo
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Salvador,
Cierto, todos iguales, pero todos distintos.
Un abrazo
Original y bonita, si señor.
ResponderEliminarTodos somos un poco como esa planta, pero no nos atrevemos a mostrarnos orgullosos como ella y optamos, como el camaleón, por camuflarnos en el paisaje.
Un beso
María Jesús,
ResponderEliminarPero... A veces es cuestión de simple timidez :(
Yo soy así, me gusta el mimetismo.
Busca en la pestaña "Search" la entrada "Soy mimética"
Un abrazo