Esta mañana me fui temprano para Almería, mi cara reflejaba el sueño que aún tenía y, me pregunté si alguien lo notaría.
De repente se me ocurrió indagar un poquillo en las caras de la gente que me rodeaba, fue sólo cuestión de minutos, lo que dura un semáforo, pero suficiente para que una idea se me pasara por la cabeza.
Me fije en un hombre que sonreía con unos dientes grandísimos, me recordó al "Smiley de la sonrisa grande", todo dientes él, y todo orgulloso de enseñarlos… Ese Smiley me gusta especialmente.
Me fije en un hombre que sonreía con unos dientes grandísimos, me recordó al "Smiley de la sonrisa grande", todo dientes él, y todo orgulloso de enseñarlos… Ese Smiley me gusta especialmente.
De ahí pasé a mirar a la gente con otros ojos; a intentar descubrir en algunos, más caritas de Smileys, y LO CONSEGUÍ.
Imaginé al tímido con sus coloretes rojos, al malhumorado, al feliz, al temeroso…Es increíble como esos simples iconos reflejan los estados de ánimo, la personalidad… Y como las personas demostramos nuestro estado de ánimo simplemente con nuestra mirada y una simple mueca…
Os prometo que pasé un buen rato.
Lo haré más a menudo ;)Perdonad la mala calidad de los montajes, pero tenía mucha prisa y poco tiempo...
creo que la imaginación cuenta un montón en estos casos..
ResponderEliminaryo creo que a la misma persona dependiendo de nuestra forma de mirarla podemos ponerla diferentes caras...
aunque algunos solo tienen una...
yo que se jajaja
la cuestión es que madrugaste, que de vez en cuando no esta mal y pasante un buen rato...
pd. mi mamita nacio en Almeria..
besos...
Lander, intentaló... funciona de veras. Ya me lo dirás.
ResponderEliminarjeje
Y... una pregunta.
Tu mamita no viene nunca por aquí??
Se que estamos lejos, pero después del Caribe te aseguro que no es tanto.
Besos
Es muy interesante usar la capacidad que todos tenemos para observar y sacar conclusiones.
ResponderEliminarUn beso.
De veras lo es, yo suelo imaginar historias de personas que encuentro en determinados momentos.
ResponderEliminarObviamente no sé si acierto, casi nunca hablo con ellas o las vuelvo a ver.
Besos