Me gusta sentir como se va acercando el silencio cuando el tren se aleja, y percatarme entonces de que puedo escuchar el casi siempre imperceptible tic tac del reloj de la estación.
Sentada en un banco espero a la nada y comparto con las ausencias todo lo que hace tiempo llevo dentro: mentirosas sonrisas, alegres lágrimas, amistades que traicionan, manos amigas que no conoces de nada…
Disfruto cuando las voces a mi alrededor callan y sólo se deja oír la voz de mi alma.
Y cuando un nuevo tren hace su entrada, toda esta dicha que ahora siento, acaba.
Una estación vacía, un sitio tan bueno como cualquier otro para dar rienda suelta a tus pensamientos...
ResponderEliminarUn abrazo
No hay nada tan evocador como una estación vacía.
ResponderEliminarHuy Tus palabras son tristes, se llena tu pensamientos de recuerdos , de los recuerdos que se deben olvidar que el pasado ya no está, al menos encuentras el silencio del presente, y llega el tren y el silencio se acaba. No dejes que te llene la nostalgia. escribes precioso ,pero mira todo lo bello que tienes además de tu silencio.
ResponderEliminarUn beso
Una metáfora de nuestras vidas.
ResponderEliminarBuena metáfora.
Así de duro es lo que nos rodea.
Besos.
Tracy,
ResponderEliminartotalmente de acuerdo contigo.
Abrazos
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André,
¿a quién no le evoca pensamientos de este tipo una estación vacía? No es tristeza. Es simplemente dar rienda suelta a la mente y que recorra los senderos que ante el bullicio y el ruido, tiene vedados.
Un abrazo
A veces, amigo Toro, ciertas escenas nos evocan cosas así.
ResponderEliminarMe alegro de que te gustara.
Un abrazo
Muy buenos los contrastes.
ResponderEliminarMe gusta mucho como los has ubicado en esta escena de soledad que nos presentas.
Un beso.
Mercedes.
bonito fondo de blog......
ResponderEliminarbss. Angie
el tren de los lamentos..
ResponderEliminarGracias Mercedes.
ResponderEliminarTus palabras sabes que las tengo muy en cuenta.
Un abrazo
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Angie,
jaja, pues a mí no me acaba de convencer, pero probé tantos que al final acabé por escoger éste que era el que menos me disgustaba.
Un abrazo
Y Otros paisajes,
ResponderEliminar... que se alejan con él.
Un abrazo
Me gusto la frase de ...como se acerca el silencio cuando el tren se aleja. Besos, me quedo pensando.
ResponderEliminarLeyendo se me ha venido a la cabeza, no un pensamiento, sino recuerdos, que mira por dónde son de un patio de Sevilla, de uno de mis poetas favoritos: Antonio Machado.
ResponderEliminarDices: Disfruto cuando las voces a mi alrededor callan y sólo se deja oír la voz de mi alma.
Yo recuerdo al poeta con:
Desdeño las romanzas de los tenores huecos
y el coro de los grillos que cantan a la luna.
A distinguir me paro las voces de los ecos,
y escucho solamente, entre las voces, una.
Guau. Lo siento, es que cuando leo a Machado, levito :))
Pilar,
ResponderEliminarUna más de esas frases que te hacen pensar...
Un abrazo
Alfonso,
ResponderEliminares que Machado es mucho Machado. A mí también me encanta. Es tan sencillo, y a la vez tan profundo...
Bonito comentario. Gracias
Saludos
cómo se va acercando el silencio...que frase más bonita y descriptiva; como la vida misma.
ResponderEliminarBesos
Gracias Lola. Es una frase que describe muy bien ese momento en el que el tren se aleja.
ResponderEliminarUn abrazo
Las estaciones, los aeropuertos, los embarcaderos. Lugares que para mí tienen un sentido especial, porque es donde se conjugan nuestras emociones, nuestras ansias de vida y aventura, nuestra tranquilidad espiritual y nuestras inquietudes...
ResponderEliminarBsos.
Profundo comentario, José. Qué razón llevan tus palabras.
ResponderEliminarSon lugares cargados de tantas emociones...
Un saludo
a ver .....yo soy mas de Ferrandiz, pero este está bonito....muy de tus colores.........
ResponderEliminarBss............angie
Jaja, la foto está en blanco y negro, el color se lo di yo para que no desentone con el resto del fondo.
ResponderEliminarY sí, son mis colores. ¡Cómo me conoces!
Besos
Toc, toc, toc, ¿se puede?
ResponderEliminarVuelve el hijo prodigo...
Un abrazo.
Siempre eres bienvenido, Cornelivs.
ResponderEliminarAbrazos
Hay tantos vacíos que desmenuzarlos es un peligro Mon, suelen venir de la mano del desencanto, aunque un buen rato de soledad nos viene bien a todos; encontrarse con uno mismo es un placer (y encontrar a otro que te dé placer también es buenísimo jaja)
ResponderEliminarUn abrazo
Las estaciones me resultan melancólicas porque las relaciones con el adiós, con la lejanía, con la distancia, y allí a lo lejos, al ver el tren alejarse, la mente puede ir más rápido que el tren y volar hasta muchos lugares.
ResponderEliminarUn besazo.
Las relaciones nooooo aysss que quise decir "las relaciono", perdona por el error.
ResponderEliminarOtro beso.
Vivian,
ResponderEliminarpero como tú bien dices a todos nos viene bien un tiempo en la sola compañía de uno mismo. De placeres, jeje, mejor callo, que me quieres tirar de la lengua.
Un besote grandeee
Te echo de menos, Vivian.
Pues a mí, María, me hacen reflexionar en tantas cosas... Encuentros, adioses, la vida la fugacidad de las cosas...
ResponderEliminarDan pie al diálogo con uno mismo, que por otro lado, nunca está de más.
Me alegro "verte" de nuevo, María.
Un abrazo
Tus letras siempre son una delicia amiga.
ResponderEliminarcon mis mejores deseos para estas navidades
¡felices fiestas!.
Gracias Ricardo,
ResponderEliminarFeliz Navidad a tí también. Te envío un abrazo envuelto en papel de estrellitas.
;)
La foto que muestras dede luego que pude ayudar a encontrarse con si misma. Es un lugar mágico,verdad?
ResponderEliminarEs un tesoro igualmente disfrutad de un lugar así a solas. Con lo ruidosos que somos y lo rápido que vamos a todos los lados.
Hay que aprovechar esos momentos!!
Buen finde Montse.
Es una imagen que a mí me inspiró esas palabras que aquí lees, pero creo que la típica visión ante la que todo el que se enfrente a ella dejará escapar un OHHHH!!!
ResponderEliminarUn abrazo y buen finde a tí también.
Montse, hay lugares que se prestan a eso, a dar rienda suelta a los pensamientos, pero te admiro a tí, que lo haces con una simple imagen.
ResponderEliminarUn beso
Teresa
Teresa, es cuestión de imaginación. Meterte en la imagen e imaginar que todo lo que ves, realmente te rodea.
ResponderEliminarGracias, jeje
Un abrazo
Me gusta cuando escribes los textos cortos, concisos y explicas con pocas palabras tantos sentimientos¡. Eso pocas personas saben hacerlo. Breve y bueno, ...
ResponderEliminarEl silencio es bueno cuando necesitas encontrarte contigo mismo...pero el bullicio es importante también para espabilar y salir de nuestro mundo.
La fotografia que acompañas es perfecta para acompañar tu post.
un abrazo Montse¡¡
Gracias Mercedes por tus palabras. La verdad es que a veces me siento como pecando de breve, pero es que me siento incapaz de dar rodeos a lo que se puede decir con pocas palabras.
ResponderEliminarEl silencio es muy necesario, pero como tú bien dices, también lo es el bullicio de la gente.
Un abrazo
Una estación de tren puede ser muy sugerente a la hora de divagar y dejar que la mente nos lleve por distintas historias, tantas como miradas nos vamos encontrando en nuestra espera.
ResponderEliminarUn beso
FELIZ SEMANA NAVIDEÑA
UN BESAZO
mj
Se presta, sí, amiga MJ a divagar e imaginar, a reflexionar e intentar comprender... Nos da pie para dejar por un rato, lo que dure la espera, a la mente volar.
ResponderEliminarUn abrazo
Mi ciudad no tiene tren... mis experiencias con las estaciones son como pasajera; pero me gusta tu reflexión, puedo entenderla aún sin vivir cerca del tren.
ResponderEliminardos abrazos :)
En muchas estaciones
ResponderEliminarse fraguan esperanzas
para la dicha.
Bellas palabras Montse.
¡Felices fiestas navideñas!
Te abrazo con cariño, besos.
Mariluz,
ResponderEliminarme alegro de que te guste y la entiendas. Precisamente estos días las estaciones están llenas de gente que comparte sentimientos ...
Un abrazo
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Marisa,
También te deseo unas felices fiestas de Navidad, y que el año nuevo venga cargado de alegrías.
Gracias por tus palabras.
Abrazos
Siempre he sido un maldito curioso, amo lo nuevo con maligna avidez, quizás por aquello que Tronken me inculcó y que deja su otro vacio u olvido: “La curiosidad que siento por cada nuevo atardecer me impide recordar el anterior”
ResponderEliminarES una pena, amigo, porque hay atardeceres que nunca deberíamos olvidar.
ResponderEliminarUn abrazo
:)
ResponderEliminarPero es momentaneo...
Otro
¿Quedan todavía relojes (que no sean digitales) en las estaciones?
ResponderEliminarrlfox,
ResponderEliminarjeje
Ok
recibido
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Amelche,
en la de la imagen parece que sí.
Un abrazo
Me fascinan las estaciones de tren, por cochanbrosas y desoladas que sean, siempre me parecen atractivas. Poseen un encanto del que carecen las de autobús, desde luego. Yo tampoco conozco ninguna estación en donde funcione un reloj que no sea digital. Valoro enormemente el silencio, pero una estación sin trenes, como metáfora de una vida, es muy triste. Hermoso relato.
ResponderEliminarBello comentario, amiga. Está claro que eres un alma sensible, y a las que somos así, las cosas nos hablan. Como esta estación que grita un adios al último tren que de ella partió
ResponderEliminarUn abrazo
Que hermosa frase:
ResponderEliminarel silencio que se crea cuando el tren se aleja....( y un nuevo tren da entrada al ruido interior.. )
muy buena.
buenas noches.
Gracias Marcelo. Me alegro de que te gustara mi reflexión.
ResponderEliminarUn abrazo y buenas noches a tí también.
Creo que las olas no dejan oír el quejido de las rocas al ser golpeadas, es el quejido lo que suena.nunca lo había pensado.
ResponderEliminarGracias por tus reflexiones.
boa noite
No vas a creerlo: Estreno literalmente el 2012 leyendo tu blog.
ResponderEliminarEl azar, solo él, me ha conducido.
¡Cómo me gusta lo poquito que he leído!
¿Me permites seguirte?
¡Hecho!
Marcelo, salió así, no lo pensé, si lo pienso, algo hubiera fallado, pero me gusta como quedó la imagen.
ResponderEliminarUn abrazo
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Pili,
qué alegría. Es un notición. Alguien que en vez de estar comiendo uvas, estaba leyendo y para colmo de bienes, en mi rinconcito. Por supuesto que te dejo seguirme. Es más. EStoy encantada.
Un abrazo y hasta pronto.
Feliz 2012